viernes, 29 de mayo de 2009
Empresa FC
Liberia y Herediano jugaron la final del torneo de verano del futbol de Costa Rica. Una final que se vio empañada de un gran polémica.
Todo empezó cuando se jugó la semifinal entre Saprissa y Liberia. En el primer juego 3 jugadores de Liberia habían recibido una tarjeta amarilla sumando asi cinco tarjetas, con lo cual se perderían el juego siguiente. Después de un ir y venir entre varias instituciones disciplinarias los jugadores pudieron jugar.
Saprissa jugó el partido pero afirmo que independientemente del resultado iban a apelar la desición. Se jugó el partido y Saprissa perdió. Cumpliendo su palabra apelaron y se armó una clase de safarancho bochornoso.
La UNAFUT decía que la final seguía en pie, la FEDEFUT decía que no, que la suspendieran, Saprissa decía que se hiciera valer el reglamento, Herdiano decía que ellos no tenían nada que ver con todo eso que estaba pasando en fin un verdadero espectatulo.
Al final se arreglo todo a regañadientes y la final se pudo jugar. El primer partido se jugó en Liberia y tuvo un marcador de 0-0. El segundo se jugó en Heredia y allí Liberia ganó 0-3 consagrandose así por primera vez en su historia campeón de Costa Rica.
Pero, ¿que se aprendió de todo esto? Muchos dirán que los equipos "pequeños" estan tomando fuerza. Otros dirán que la hegemonía de los equipos "tradicionales" esta llegando a su fin.
Se puede decir que los equipos con la billetera mas grande son los triunfadores. Todas estas afirmaciones son válidas y pueden ser hasta ciertas, pero sin duda la verdad es que el futbol ya no es ni volverá a ser lo que era antes.
Cada vez se oye más en el futbol palabras como gerentes, juntas directivas, abogados, apelaciónes, por nombras algunas. El fútbol evoluciona y ahora los equipos parecen mas bien empresas.
Lo que empezó como once jugadores jugando con un balón de cuero de vaca en un potrero ahora es una actividad que mueve cantidades sorprendentes de dinero.
Todo esto se podría ver como algo bueno, pero en realidad no lo es. Con forme los equipos evolucionan se va perdiendo el verdadero sentido de fútbol. Un claro ejemplo fue lo que paso en esta final.
Gracias a que un abogado apeló una desición arbitraria la final se atraso unos cuantos dias, ganando absolutamente nada. Ahora la pregunta es ¿Saprissa apeló por que quería ser campeón o por que iba a perder la plata de las entradas, la plata del premio y la plata que recibe por entrar a la Concachampions? A todo el mundo le gustaría pensar que es porque quería ser hexacampeón y muy probablemente sea así, pero detrás de esa razón viene la peso, la plata.
En la actualidad un equipo con plata es un equipo feliz. Los jugadores reciben plata y juegan bien. El llamado amor por la camiseta ya no existe, quedan muy pocos jugadores que juegan por el equipo. Ahora juegan por la plata que le pagan.
Un ejemplo de esto es el famosisimo Cristiano Ronaldo. Él está buscando cualquier excuza para salir del Manchester United y así poder jugar con el Real Madrid donde la van a pagar mucho mas de lo que le pagan en su actual equipo.
Lo único que queda es desear que las nuevas generaciónes de jugadores cambien todo esto y que el amor por la camiseta vuelva.
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